Conoce Chile

El país más largo y delgado del mundo se extiende entre la Cordillera de los Andes y el Océano Pacífico. Además de compartir fronteras con Argentina, Perú y Bolivia, Chile también posee territorios en la Polinesia y la Antártica, transformándose en una nación tricontinental.

La República de Chile, con una población total de más de 19,6 millones, es un país en dirección norte-sur a lo largo de los Andes sudamericanos, con una superficie de 756.700 km cuadrados, más del doble que la superficie de Alemania.

Es un país angosto pero bastante extenso en longitud: tiene un ancho máximo de 117 km y su extensión es de 4.270 km, con una línea de costa de 6.435 km.

En Chile existen lugares donde no se han registrado precipitaciones hace decenas de años, mientras en otras zonas la lluvia resalta el verde de los bosques milenarios.

Con una diversidad que encanta y que sorprende, y como consecuencia de su geografía, Chile tiene casi todos los climas del planeta y las cuatro estaciones del año bien diferenciadas. La época más cálida es entre octubre y abril, y la temporada con menores temperaturas se extiende entre mayo y septiembre.

La temperatura va declinando a medida que se viaja hacia el sur. En el norte el calor del día es permanente durante el año, mientras que las noches son bastante más frías. La zona central se caracteriza por un clima mediterráneo, y el sur por temperaturas más bajas y precipitaciones más recurrentes a lo largo del año.

La lengua oficial es el español y aunque es hablado por todos los chilenos, también existen idiomas o dialectos que aún utilizan las distintas comunidades indígenas presentes en el país.

Con el español como herencia de los conquistadores hispanos y la incorporación, a través de los años, de modismos locales y extranjeros, el lenguaje fue adquiriendo sus propias particularidades. Así, rasgos fonéticos, sintácticos y léxicos, crearon palabras propias o chilenismos.

Frente a los grandes cambios, las lenguas indígenas aún se mantienen presentes entregando identidad a los pueblos y sus habitantes. En la Zona Andina del norte se puede descubrir el aimara y el quechua. El rapa nui o pascuense encanta la polinésica Isla de Pascua. Y el mapudungun envuelve en un aura mística algunas Zonas del Sur del país gracias al pueblo Mapuche.

Herencia social y tradición cultural se entrelazan para expresar la esencia del fin del mundo.

¿Qué es Chile?

Observación espacial en el Desierto de Atacama, glaciares milenarios en las zonas más australes del planeta, mágicos bosques y lagos ubicados a los pies de imponentes volcanes e Islas llenas de leyendas.

Desde el altiplano hasta los inexplorados territorios australes del fin del mundo, Chile invita a vivir aventuras en medio del desierto más árido del planeta, del único bosque templado lluvioso de Sudamérica, frente a glaciares milenarios que esperan ser descubiertos o bajo la atenta mirada de la imponente Cordillera de los Andes en medio del movimiento de modernas ciudades como su capital, Santiago.

Estos contrastes culturales y climáticos han marcado la identidad del país y de su gente. Cálidos, enérgicos, cercanos y amables, los chilenos comparten el amor por su tierra, que invita a construir vínculos más allá de las distancias, a vivir experiencias únicas, a descubrir Chile.

Un extenso territorio de amplios horizontes, donde la sensación de estar vivo inunda, conecta con la naturaleza e invita explorar tierras prístinas. Un desafío a los sentidos, donde su gente y toda su cultura sorprenderán gratamente con su amabilidad y hospitalidad. Una experiencia completamente nueva, donde las ballenas pueden volar, el desierto se tiñe de flores y se puede disfrutar de las cuatro estaciones del año en un solo día.

Un lugar, donde lo imposible, es posible.

Zona Norte y Desierto de Atacama

Bajo un cielo de infinitas estrellas descansa el desierto más seco del mundo a la espera de la anhelada floración

Lejos de ser inerte, el Desierto de Atacama es una zona abundante en energía, gracias a sus acogedoras culturas ancestrales y a los oasis que son fuente de vida en el desierto más árido del mundo.

Ascendiendo a más de 4.000 metros de altura en el altiplano andino, se descubren pequeños poblados que mantienen intactas sus costumbres en medio de extremos escenarios.

Visitar San Pedro de Atacama y explorar paisajes únicos en el mundo, tales como salares, géiseres y lagunas de un intenso color azul, son parte de los lugares que asombran y cautivan.

Emprender un viaje por las estrellas y conocer más sobre los astros y las constelaciones es posible en uno de los múltiples observatorios astronómicos de la zona norte del país.

Zona Central, Santiago y Valparaíso

Valles alojados entre mar y cordillera dan vida a una tierra de sabores que despiertan los sentidos

Sofisticación del globalizado siglo XXI junto a las más arraigadas tradiciones locales conviven en la Zona Central de Chile.

Santiago, con una población de más de 7,1 millones de habitantes es la multifacética capital de Chile y se posiciona habitualmente como una ciudad líder en América Latina en una serie de factores sociales, económicos y ambientales.

La capital chilena es considerada como una ciudad global de clase Alfa-, y una de las ciudades más inteligentes y competitivas de América Latina, con un alto nivel de calidad de vida y una de las más seguras de la región Latinoamericana.

A 115 km de Santiago se encuentra la ciudad puerto de Valparaíso, la cual se caracteriza como una experiencia intensa por sus coloridas casas enclavadas en los cerros y cercana a las playas de Viña del Mar y Reñaca, a orillas del Océano Pacífico.

Para los amantes de la nieve, Chile posee los mejores centros de ski de Sudamérica.

A 33 km de Santiago, en la majestuosa Cordillera de los Andes, y a una altura de 2.400 msnm., se encuentran Valle Nevado, con las pistas más altas de Chile, y el centro de ski Farellones, el cual creció con los primeros esquiadores de la zona a principios de 1930.

Solo dos horas en auto separan las montañas del Océano Pacífico, característica única de un país angosto, pero el más extenso del mundo.

Rapa Nui

Enigmas y leyendas de una cultura ancestral enriquecen los paisajes y playas tropicales en el ombligo del mundo

No hay otro lugar habitado en el mundo que esté tan aislado en el mar como la polinesia chilena. Así de única es Rapa Nui. Y es esa misma condición la que le otorga su autenticidad y un aura de fascinantes misterios y secretos.

Rapa Nui se caracteriza por sus playas con arena de color rosa, por los volcanes y praderas que la componen, y sus más de 1.000 Moai, los cuales fueron testigos silenciosos de una compleja sociedad.

La intrigante cultura del pueblo Rapa Nui durante la Tapati, su fiesta tradicional que se realiza en el mes de febrero, en la que se ponen a prueba las habilidades de los diversos equipos locales, es digna de ser vivida.

Un lugar mágico de sabias tradiciones, donde el ecosistema vivo crece y se desarrolla a su ritmo natural

La intensa lluvia cae limpiando los cielos que luego vuelven al azul intenso. Huele a bosque y a tierra húmeda. ¡Bienvenidos al sur de Chile!

Su belleza escénica única y la herencia cultural de sus pueblos originarios, donde la cultura Mapuche es una indudable protagonista, es parte de esta zona del país.

Las Araucarias, el Coihue y el Alerce, entre otros, son algunas de las especies nativas más longevas de esta zona, algunos ejemplares con cientos, incluso miles de años, siendo el más añoso el Alerce Milenario.

Prueba de esta majestuosidad, en la región de Los Ríos, en el Parque Nacional Alerce Costero, hay un ejemplar de Alerce, que se estima tiene más de 3.600 años.

Este impresionante árbol, llamado el “gran Abuelo Alerce”, de más de 30 metros de alto, tiene un tronco que en su base mide más de 4 metros de diámetro, 11 metros de perímetro y es el árbol más longevo del hemisferio sur, y el tercero más antiguo del planeta.

Cuando germinó, en Egipto reinaba Tutmosis I, comenzaba la dinastía Micénica en Grecia, aparecían las primeras Tribus Celtas en Europa y según historiadores bíblicos, en esa época se produjo el Éxodo de los Israelitas.

Para aquellos que gustan del deporte blanco, esquiar en medio de estos bosques milenarios es una oportunidad única de relajar el espíritu, estando rodeado de estos inspiradores paisajes naturales.

En el sur de Chile se pueden practicar deportes náuticos en lagos y ríos, disfrutar de un día de pesca, o explorar la variada flora y fauna en las reservas y parques nacionales, cerca de hermosas ciudades como Pucón, en el Lago Villarrica.

Exótica, extensa, de belleza infinita y salvaje. Así describieron a la Patagonia los exploradores que llegaron hace casi 500 años, y se mantiene hasta el día de hoy esta naturaleza inalterada, plagada de montañas, fiordos, glaciares, bosques y estepas.

En medio de los cinematográficos paisajes se pueden descubrir ciudades y pueblos pioneros, donde se respira una historia ganadera y el estilo del gaucho de la Patagonia.

Recorrer en auto o en bicicleta la Carretera Austral, es maravillarse con lo mejor del norte de la Patagonia.

Para los amantes del trekking, las Torres del Paine es el destino ideal: bosques, montañas, saltos de agua, lagos y vistas privilegiadas a los Campos de Hielo Sur serán parte de una vivencia única.

Para experimentar un viaje inolvidable y aventurero, hay que explorar la zona más austral del continente americano y embarcarse en una experiencia antártica.

Navegar por los fiordos y canales, por el Estrecho de Magallanes, disfrutar la presencia imponente y milenaria de cientos de glaciares, junto a delfines, pingüinos y orcas, y llegar hasta el Cabo de Hornos, el punto más austral del continente, o seguir más allá, hasta llegar a la Antártica, considerado un tesoro científico y ecológico, es sin duda alguna, una de las experiencias más inolvidables en este rincón al fin del mundo.